La reunión de Saint-Imier ha permitido a muchos de los grupos y militantes que son miembros y no miembros de la Internacional de Federaciones Anarquistas (FAI-IFA) reunirse para trabajar junto. A la IFA le gustaría resumir los acontecimientos de los últimos días.

Hace ciento cuarenta años en esta ciudad se fundó un movimiento internacional anti-autoritario. Este movimiento desempeñó un papel importante en la creación de un movimiento organizado anarquista. Se trabajó entonces para la transformación social profunda, y de esta manera hemos participado, como IFA, en el encuentro internacional en St-Imier. Lo que tenemos que ofrecer es el mejor tipo de sociedad que la humanidad es capaz de lograr. Queremos crear un mundo en el que hay una completa igualdad económica, por lo que entendemos que no debe haber ninguna propiedad personal, sino que producen y poseen todo en común, sin necesidad de dinero. Pero así como la igualdad económica, no habría libertad personal máximo. Esto significa que debemos vivir como queremos y nadie puede obligarnos a hacer nada que no queremos hacer, o nos impiden hacer lo que queremos hacer menos que esto limita la libertad de los demás. Por lo tanto, no habría jerarquías ni opresión de ningún tipo. No habría necesidad de un Estado o de la policía, porque no tendríamos necesidad de controlar o coaccionar. No habría necesidad de guerras o conflictos global, porque no tendríamos enemigos políticos y el deseo o ninguna necesidad de aprovechar todos los recursos de los demás. Esto es lo que llamamos anarquismo. Los anarquistas rechazan la idea de que es la naturaleza humana que uno hazañas personales a otros y que son desiguales.
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