Solo hicieron falta 24 horas para que los rumores de despido dejaran de ser rumores. Raga, la empresa que ha sustituido a Urbaser en el mantenimiento de los parques singulares de Madrid, anunció un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) el pasado 2 de diciembre, un día después de hacerse cargo de la concesión municipal de Madrid Río. De momento, la empresa se ha negado a subrogar los contratos de 12 de los 254 jardineros que componen la plantilla, lo que, según el responsable de jardinería de CC OO, Cándido Rodríguez, “es peor que el despido”. “Se quedan en un limbo jurídico, sin cobrar el paro porque legalmente la antigua compañía no los ha echado”. Por ello, el comité de empresa, integrado por CC OO y UGT, ha convocado una huelga indefinida partir del próximo día 15.
Los trabajadores de Madrid Río, que el pasado 1 de diciembre empezó a formar parte del contrato integral de parques históricos, temían por sus puestos desde que Raga se adjudicó el concurso de mantenimiento con una rebaja del 27% sobre el precio de licitación, que el Ayuntamiento ya había reducido un 9% respecto a la cantidad que pagaba a la anterior concesionaria. Raga aceptó un contrato de 111 millones de euros repartidos en ocho años, “a sabiendas de de que las cuentas no les iban a cuadrar”, opina el responsable de jardinería de CC OO. Y los empleados eran conscientes de que si la empresa tenía que recortar gastos, empezarían ellos.