Restos de la fiesta peñista en una pradera de Torre Ramona, ayer. - Foto: EL PERIÓDICOLa fiesta de los peñistas en el parque de Torre Ramona aún lucían ayer en todo su esplendor por todos los rincones porque la huelga de los jardineros provocó que nadie se acercara a retirarlos. Los servicios mínimos decretados no llegaron para retirar las bolsas de basura que se amontonaban cerca de los contenedores o esparcidos por todo el recinto. Una imagen que no escapó a los vecinos de la zona, que lamentaban que tener que sufrir las consecuencias de estas protestas, aunque dicen entender a los trabajadores en su reivindicación.
Una mala imagen ver bolsas y restos de la fiesta por las explanadas, junto a los árboles, en medio de los estanques, donde también había algún contenedor flotando. Este parque era el que mayores consecuencias sufrió en la primera jornada de huelga aunque los trabajadores ya advirtieron de que esta imagen puede extenderse a otros parques si se mantiene durante muchos días, porque el mantenimiento se resentirá a pesar de los servicios mínimos.